El concepto de planta libre revolucionó la arquitectura – la promesa de la luz, espacio y la colaboración sin esfuerzo alguno (ni hablar de la rentabilidad que significa poder ubicar a grandes grupos de personas en un mismo lugar). Hoy en día es prácticamente un estándar de diseño, pero ¿bajo qué costo?
Un nuevo informe de los investigadores Jungsoo Kim y Richard de Dear, publicado en el Journal of Environmental Psychology (Revista de Psicología Ambiental), concluye que la planta libre trae consigo graves daños colaterales, como por ejemplo, la falta de “privacidad de sonido”, que superan sus cualidades positivas. Más aún, de acuerdo con los resultados, la planta libre no cuenta en lo absoluto con una considerable mejora en la comunicación.
De acuerdo a lo informado por los investigadores a The Guardian informó: “Nuestro resultados contradicen categóricamente la aceptada sabiduría de la industria que prometía en el diseño de planta libre una mejora en la comunicación entre colegas, y un ambiente de trabajo más satisfactorio. Incluso, en la medida en que la planta libre hizo que la comunicación fuera un poco 'menos mala' de lo que podría haber sido para algunos, fracasó completamente en los negativos impactos de sonido y privacidad que generó.”
El estudio parece alinearse con otro reciente informe publicado por Gensler, el cual descubrió que “en oposición con la tendencia de lugares de trabajos diseñados para fomentar la colaboración, los trabajadores, en comparación a lo que ocurría hace cinco años, pasan más tiempo enfocados en tareas individuales. En consecuencia, más del 50% de los encuestados dijeron que estaban distraídos por otros cuando debían concentrarse. Es más, la encuesta encontró que cuando los empleados no podían concentrarse de forma individual, el trabajo colaborativo también era menos productivo.”
Sin embargo, el estudio de Kim y de Dear no midió el efecto de espacios “híbridos” que ofrecen a los trabajadores la opción de espacios públicos y privados; el estudio Gensler, por su parte, sugirió que “la mejor manera de diseñar un exitoso lugar de trabajo es proporcionando un equilibrio adecuado entre los espacios, permitiendo a los empleados concentrarse y poder colaborar con los demás – lo más importante es asegurarse de que los espacios no interfieran unos con otros.”
Probablemente, como con todas las cosas buenas, con moderación, la planta libre no sería tan mala solución para los espacios de trabajo, finalmente. Cuéntanos qué opinas tú a continuación.
Via The Guardian